EUROPA
PRESS
27 octubre
2019
Una
dieta alta en sal allana el camino hacia el deterioro cognitivo vinculado al
Alzheimer
Una dieta alta en sal puede afectar
negativamente la función cognitiva al causar una deficiencia del óxido nítrico
compuesto, que es vital para mantener la salud vascular en el cerebro, según un
nuevo estudio en ratones de investigadores del Weill
Cornell Medicine, en Nueva York, publicado en la
revista 'Nature'. Cuando los niveles de óxido nítrico
son demasiado bajos, se producen cambios químicos en la proteína tau en el
cerebro, lo que contribuye a la demencia.
En el estudio, los investigadores buscaron comprender la
serie de eventos que ocurren entre el consumo de sal y la mala cognición y
concluyeron que reducir la ingesta de sal y mantener los vasos sanguíneos sanos
en el cerebro puede "evitar" la demencia. La acumulación de depósitos
de tau se ha implicado en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer en
humanos.
"Nuestro estudio propone un nuevo mecanismo por el cual
la sal media el deterioro cognitivo y también proporciona más evidencia de un
vínculo entre los hábitos dietéticos y la función cognitiva", señala el
autor principal del estudio, el doctor Giuseppe Faraco,
profesor asistente de investigación en neurociencia en el cerebro de la familia
Feil y Mind Research Institute en Weill Cornell Medicine.
El nuevo estudio se basa en la investigación publicada el
año pasado en 'Nature Neuroscience'
por el doctor Faraco y el autor principal doctor Costantino Iadecola, director del
Instituto de Investigación de Mente y Cerebro Feil Family y la Profesora de Neurología Anne Parrish Titzell en Weill Cornell Medicine.
El estudio de 2018 encontró que una dieta alta en sal
causaba demencia en ratones. Los roedores no pudieron completar las tareas de
la vida diaria como construir sus nidos y tuvieron problemas para pasar las
pruebas de memoria. El equipo de investigación determinó que la dieta alta en
sal estaba causando que las células en el intestino delgado liberen la molécula
interleucina-17 (IL-17), que promueve la inflamación
como parte de la respuesta inmune del cuerpo.
IL-17 entró en el torrente sanguíneo y evitó que las células
en las paredes de los vasos sanguíneos que alimentan el cerebro produzcan óxido
nítrico. Este compuesto funciona relajando y ensanchando los vasos sanguíneos,
permitiendo que la sangre fluya. Por el contrario, la escasez de óxido nítrico
puede restringir el flujo sanguíneo.
Según estos hallazgos, el doctor Iadecola,
el doctor Faraco y sus colegas teorizaron que la sal
probablemente causaba demencia en ratones porque contribuía a restringir el
flujo sanguíneo al cerebro, esencialmente hambriento. Sin embargo, a medida que
continuaban su investigación, se dieron cuenta de que el flujo sanguíneo
restringido en ratones no era lo suficientemente grave como para evitar que el
cerebro funcionara correctamente.
"Pensamos que tal vez había algo más aquí",
explica el doctor Iadecola. En su nuevo estudio de 'Nature', los investigadores encontraron que la disminución
de la producción de óxido nítrico en los vasos sanguíneos afecta la estabilidad
de las proteínas tau en las neuronas. Tau proporciona estructura para el
andamiaje de las neuronas. Este andamiaje, también llamado citoesqueleto,
ayuda a transportar materiales y nutrientes a través de las neuronas para
apoyar su función y salud.
"La tau se vuelve inestable y sale del citoesqueleto causa problemas", apunta el doctor Iadecola, y agrega que se supone que la tau no está libre
en la célula. Una vez que la tau se desprende del citoesqueleto,
la proteína puede acumularse en el cerebro y causar problemas cognitivos. Los
investigadores determinaron que niveles saludables de óxido nítrico mantienen
la tau bajo control. "Pone freno a la actividad causada por una serie de
enzimas que conducen a la patología de la enfermedad de tau", añade.
Para explorar aún más la importancia de la tau en la
demencia, los investigadores dieron a los ratones con una dieta alta en sal y
restringieron el flujo sanguíneo al cerebro un anticuerpo para promover la
estabilidad de la tau. A pesar del flujo sanguíneo restringido, los
investigadores observaron una cognición normal en estos ratones. "Esto
demostró que eso es lo que realmente causó que la demencia fuera tau y no falta
de flujo sanguíneo", prosigue el doctor Iadecola.
En general, este estudio destaca cómo la salud vascular es
importante para el cerebro. "Como demostramos, hay más de una forma en que
los vasos sanguíneos mantienen el cerebro sano", precisa el experto.
Aunque se necesita más investigación sobre el consumo de sal
y la cognición en humanos, el estudio actual en ratones es un recordatorio para
que las personas deben regular el consumo de sal,
añade el doctor Iadecola. "Y las cosas que son
malas para nosotros no provienen de un salero, sino de alimentos procesados y
de restaurantes, advierte. Tenemos que mantener la sal bajo control. Puede
alterar los vasos sanguíneos del cerebro y hacerlo de manera cruel".